La primera temporada de anime que comentamos en el blog y la última de este año está llegando a su fin. A pocos días para recibir al invierno nuevamente, estamos en el momento de revisar estos tres meses y contarle al mundo qué gran serie llenó nuestas semanas de entretenimiento de calidad, señalar esos bodrios del que cualquier espectador debe mantenerse alejado y, en ocasiones, hablar de sorpresas…Para bien o para mal. Así que sin más, damas y caballeros, pasaremos a enumerar aquellas series que me acompañaron desde octubre hasta estas últimas jornadas del año. Estarán ordenadas de la peor a la mejor, para orientar a aquel rezagado que quiera echar un vistazo a una joyita que se haya perdido.
Just Because!
- Guión original
- Pine Jam
- 12 episodios
- Romance, escolar, drama
- Calificación: ★1/2
Considero que el título de esta serie refleja todo su argumento y su final, simplemente porque o porque si sería la traducción que define las decisiones tomadas para el desarrollo de la trama. Hasta diría que no tiene sentido verla porque ya se sabe que va a pasar desde el principio. El opening prácticamente te cuenta en un minuto todo lo que sucede en la serie sin miramientos.
Luego de un primer capítulo interesante, este anime se encarga de quitarte las expectativas y hacerte saber que no vale la pena. El triángulo amoroso de por si estaba falto de encanto de los personajes: el protagonista, por más que intenté comprenderlo, es un plástico viviente, la chica que sabíamos de primeras que iba a quedarse con él no resultó tan blanda como pensé, por suerte le dan un interés en el estudio con el que me identifiqué y Komiya, que se nos quedó en la friendzone (¿mencioné que es predecible hasta decir basta? Porque les aseguro que esto no es un spoiler) tenía la carisma de la que carecían los otros dos, pero tampoco sirve para rescatar a este trío lamentable, sobre todo si le rompen el corazón. Tampoco rescatan a este despropósito la mejor pareja de la serie – que tampoco es buena, ojo – integrada por Morikawa y Hanato, ya que entran en un doloroso segundo plano, cuando ellos eran lo importante al comenzar la historia. Además, puede pasar que en una serie romántica no se queden juntos los que tanto shipeaste, pero al menos haz de la pareja que quede una buena, decente, aceptable, algo. Pero no, nos niegan hasta eso, dándole escasas escenas juntos y otorgándoles la menor química posible. Les dan hobbies para que digas «Oh, mira, tienen personalidad. No es de estos animes en los que sólo están en el colegio y lo único en su cabeza es el amor, wow». Sigue siendo un desastre poco creíble. Parece una adaptación cualquiera de una novela visual.
Me horroriza ser consciente de que yo sabía que esto iba pasar y aún así me dejé embaucar por un par de escenas que daban a entender que tal vez, y sólo tal vez, estábamos ante algo pasable. Creo que eso es lo que me indigna más, ya que este anime no es ni por asomo tan malo como otros que tuve el desagrado de ver, pero gasté mi tiempo en verlo en su totalidad (sigo sin entender cómo, en serio). Será por la nostalgia que inspira, los únicos personajes salvables o mi esperanza por ver que el shojo de la temporada fuera mejor. Pero nada, estamos ante un producto malo, así que recomiendo al que pretendía acercarse por curiosidad a éste que mejor se dirija a otras realistas mejores como Tsuki Ga Kirei (que analicé su pareja aquí ).
Kujira no Kora wa Sajou ni Utau
- Basado en el manga homónimo
- J.C.Staff
- 12 episodios
- Fantasía, drama
- Calificación: ★★1/2
Ya concluida, me duele decir que perdió muchos puntos. Mi mayor miedo con respecto al desarrollo de la historia se cumplió: doce capítulos no eran suficientes. Estábamos ante un mundo que empezábamos a conocer, personajes sin mucho tiempo para ser ellos mismos y dilemas interesantes; todo resuelto de un portazo. ¿Que si la gente de la Ballena de Barro va a empezar a usar la violencia? En absoluto, resulta que ahora pueden ser pacíficos. Aparece una nueva nación de la nada con un líder típico sin mayor explicación. Los villanos son lo más aburrido, predecible y odioso de la serie. Ese sádico y maníaco pelirrosa ni siquiera tiene un final digno. Apenas cierran puntos en la trama que ya abren otros que a nadie le importan si no tendrán un cierre.
El arte sigue siendo precioso, creo que la animación no baja de calidad. Visualmente, es espectacular. Pero lamento decir que no la recomendaría por el desperdicio que supone involucrarse con la premisa y el mundo que nos presentan para que tenga un desarrollo acortado por un final sin gracia. Otro anime que sufre de la tendencia de los doce episodios.
Animegataris
- Guión original
- Wao World
- 12 episodios
- Escolar, comedia
- Calificación: ★★★✰✰
Por suerte ya la cosa cambia un poco con ésta. Animegataris es una serie que sabe qué es y adonde va, por lo que si en un comienzo no es de tu agrado, puedes abandonarla sin problemas. Lo cierto es que se me hizo divertida una vez pasado el primer episodio (o el segundo también, no recuerdo). Ver a este pequeño club de escolares conocerse, arrastrar a nuestra protagonista a la otaquería, evitar que les cerraran el espacio, crear su propio OVA y hasta impedir que el anime absorba a la realidad. No sabía para donde iba a ir cada vez que comenzaba un nuevo episodio.
Las referencias están bien puestas, sin abusar. Se burlan de muchos arquetipos, parodian con cariño al estereotipo de fan, varios clichés de distintos géneros y de vez en cuando sacan a flote la cursilada, dando soliloquios acerca de la pasión por el anime y lo importante que es en las vidas de muchos. No es algo que destacaría en ese sentido, porque carece de emotividad cuando se ponen en ese plan.
Peca de tener personajes blandos, que están al servicio de la comedia. Una cosa que me resultó incoherente es que en un principio el cast tiene actitudes completamente animescas, y aún así cerca del final distinguen claramente los aspectos más absurdos e irreales del dibujito, como si ellos fueran parte de la realidad más mundana y lógica.
Aunque a veces no tenga tanto sentido, es una serie sobre otakus muy actual, con chistes efectivos y momentos que derriban la cuarta pared. Si ya has visto las series que mencionaré más adelante o te quedaste con ganas de disfrutar un rato con una comedia sencilla, es posible que ésta te guste. Un intermedio entre la mediocre Watamote y Lucky Star.
Mahoutsukai no Yome
- Basado en el manga homónimo
- Wit Studio
- 24 episodios (12 emitidos)
- Sale cada sábado
La historia de Elias y Chise sigue avanzando de a poco. Y sigo opinando que en el buen sentido, pues fácilmente podría haberse tornado en la tóxica relación de dependencia, o con el mago tratando a nuestra protagonista como un objeto, así que es una alegría que por el momento vaya por el camino más sano. Además de que hay personajes que cuestionan lo que pueda suceder con la pelirroja y el enigmático Elias, permaneciendo tan escépticos y expectantes como puede estar la audiencia.
Eso sí, el romance no es lo más importante en la serie. Es un slice of life en toda regla y, si lo combinamos con la magia y fantasía, tenemos una serie interesante. Nos conformamos con lo que nos vayan contando y no sabemos muy bien qué esperar, a diferencia de Children of the Whales, que estableció las reglas de su mundo y ciertas intrigas que nos hacían exigirle explicaciones llegado su final.
Esta primera mitad finalizó de una manera satisfactoria, con el pasado de Elias revelándose en pequeñas cucharadas de flashbacks y el futuro de Chise como bruja definiéndose. Otro punto a favor es que el rumbo de ella no lo define solamente su maestro, también influyen los numerosos secundarios que tienen más o menos tiempo en pantalla. La pequeña aprendiz va formando objetivos y un carácter. Cuando empecé la serie, su personaje principal era el mayor problema para mí, por su falta de personalidad ante un mundo lleno de gente interesante. Eso se fue resolviendo primero al ver las OVAS (que recomiendo echarles un ojo) y el darme cuenta de que el hilo conductor de la serie es su crecimiento, como maga y como persona: estamos viendo cómo se va enriqueciendo con todas las experiencias que vive capítulo a capítulo.
El nivel de producción sigue siendo alto, aunque noté algún que otro momento blando, compensado más tarde con escenas que requerían animación de la buena, y vaya que la tiene. La banda sonora acompaña de maravilla, con temas ya reconocibles mientras vemos la acción trascurrir. Ayudan muchísimo a construir la mística del show.
Llena de optimismo con esta serie, continuaré viendo por dónde me lleva, sin esperar algo en concreto de parte de la trama, pero ansiando disfrutar de más aventuras y relaciones entre personajes. Quedando todavía la mitad por emitirse -motivo por el cuál no está en el primer puesto de animes de temporada – Mahoutsukai no Yome es una de las cosas que más espero ver en el venidero 2018.
Net-Juu no Susume
- Basado en el webmanga homónimo
- Signal.MD
- 12 episodios
- Comedia, romance
- Calificación: ★★★ 1/2
Mi favorita de la temporada que vi mientras estaba en emisión, la pequeña historia de nuestra querida nini Moriko Morioka fue entretenida y encantadora. Incluso fue mi mayor sorpresa, ya que la premisa no me llamaba la atención, llegando a pensar que sería otra Watamote más. Fue el saber que tenía un romance decente y verla recomendada por Wanda en su blog Entre sábanas y almohadas y por Pauutopía en Otakus treintañeras lo que me hizo darle una oportunidad.
No es una gran serie, simplemente es una comedia romántica notable, con personajes con los que nos encariñamos y disfrutamos viendo sus peripecias. El tratamiento que se hace del mundo de los MMO es peculiar (aunque no debería serlo), ya que la mayoría de animes que cubren el tema – conocidos bajo el rótulo de isekai – se centran en la vida dentro del juego, mientras que aquí los personajes buscan en los juegos aquello que les falta en su día a día, cobrando más relevancia la vida fuera de la pantalla. Quita además varios prejuicios que existen alrededor de las relaciones que comienzan por internet y se enfoca en el aspecto más humano. Como toda buena comedia, hay algo trágico detrás, que perfectamente encajaría dentro de un drama, generando puntos para reflexionar.
Espero que este anime sea el precursor de más animes que utilicen a los MMO para la psicología de sus personajes y que, por supuesto, el manga en el que se basa éste continúe. El final no me desagradó y hasta diría que no es tan necesario que la sigan, a pesar de que me cuesta negar que vería con muchas ganas una continuación. El romance de Morimori-chan y Sakurai es tierno aunque algo naif considerando la edad que tienen pero bueno, no deja de ser lógica de anime.
Dudo que la recuerde como lo mejor del 2017, pero disfrute muchísimo viéndola semana a semana.
Y esos fueron los animes que seguí este otoño (o primavera, según el hemisferio). Ya finalizados, como las hojas de árbol que cayeron, dan paso a los próximos animes que inaugurarán las temporadas del 2018. Espero que tengan un buen fin de año y que el siguiente sigan conmigo viendo qué series nos dan los japoneses cada trimestre. Hasta entonces, ¡a ver anime se ha dicho!