Continuamos con el análisis mensual de parejas que nos ofrece la animación japonesa. Luego de publicar la primera entrada de este especial, me sorprendí de recibir algo de feedback por twitter para ser un blog pequeño. Me alegro de encontrar lectores que compartan ese romanticismo que me movió a escribir este tipo de entradas y espero que siga gustando. Todavía es reciente este espacio, por lo que mi calidad de escritura no es la que quisiera, confío en que con el tiempo mejore y exprese mejor lo que quiero dejar claro en los posts. Ahora sí, pasamos a la pareja de este mes.
Ya pasó un año de su estreno, pero aún así Kimi No Na Wa (Your Name), todavía sigue dando de que hablar. El éxito rotundo de Makoto Shinkai está recorriendo el mundo, y hace poco tuve la oportunidad de verla en la gran pantalla. No creo que pueda decir algo sobre el film que no se haya mencionado ya, pero sí admito que me dio muchísimas ganas de comentar la filmografía de su director, o ver más seguido anime en su formato de largometraje de lo que suelo hacer. Lo que sí me decidí a hacer es analizar a su pareja. No es un anime shojo, pero creo que igual cumple los criterios que tomo en cuenta para escoger lo que voy a analizar.
A partir de aquí se vienen SPOILERS. Recomiendo que si no la vistes no sigas leyendo, en serio. Yo espere un año sin saber nada de lo que iba a pasar y mereció la espera dejarse sorprender, avisados están.
Los protagonistas
La historia nos presenta a Mitsuha, una chica de pueblo que se siente atrapada en él. No le gusta demasiado llamar la atención y ansía conocer nuevos lugares. Sus compañeros de colegio se ríen de ella, no mantiene una buena relación con su padre (el alcalde del lugar). Vive con su abuela y su hermana, con las que se lleva bien. Su familia materna es tradicionalmente la encargada del templo local, por lo que nos presenta muchas situaciones míticas y shintoistas.
Por otra parte tenemos a Taki, un chico que vive en un pequeño departamento en Tokio. Su vida cotidiana es más similar a lo que estamos acostumbrados a ver en las series anime promedio. Por su habitación notamos su interés por la arquitectura, tiene un trabajo de medio tiempo y parece ser algo despreocupado.
En un principio ambos representan el estereotipo de chico y chica. Por lo que de sus personalidades sabemos más bien poco. Taki es algo gruñón e introvertido mientras que Mitsuha es más sensible, reservada y tiene hobbies femeninos.
No vi toda su filmografía, pero para los estándares de las cintas de Shinkai, el diseño de personajes es muy bueno, con peinados característicos y mejor dibujo. También están bien personificados como adolescentes. Al ser algo genéricos, es fácil identificarse con ellos, sobre todo teniendo en cuenta esa dualidad ciudad/campo que retrata la historia.
Se criticó la falta de profundidad de sus personajes. Pero no considero a esta película como una historia de personajes. Además, son adolecentes que tienen sus deseos y sus miedos. No todos tienen tantos conflictos como los personajes de Evangelion. Por mí, están bien para el marco del film.
Primer encuentro
La verdad es que el primer encuentro de estos dos es algo peculiar. Difícil denominarlo «encuentro» incluso. De repente, se dan cuenta de que se despiertan en el cuerpo del otro y que no se trata de un sueño. Se van a ver obligados a conocerse en profundidad e imitar su comportamiento para no alterar sus vidas ni alarmar a la gente que los rodea.
Una situación que directamente los conecta, sin necesidad de introducciones o malentendidos. No tengo mucho más que comentar al respecto sin caer en el desarrollo de su relación. De manera muy (pero que muuuy) cómica, Taki y Mitsuha tienen que lidiar con el otro. Así de simple.
Desarrollo
Esta es una historia sobre el destino y cómo las personas están entrelazadas (muy a lo hilo rojo), por lo que la fantasía y conceptos como el musubi (del cuál les dejo este interesante artículo) están presentes en cómo se cuenta la misma.
Ya de por sí, el destino junta a Mitsuha y Taki, como mencionaba antes. Abruptamente sus vidas cambiarán al vivir la vida del otro. Tan así que van a desarrollar una gran empatía entre ellos y una conexión importante, ya que nadie los conoce como ellos mismos.
Cómo no, quieren encontrarse, y ahí empezarán los problemas. Pues resulta que Mitsuha vive los acontecimientos tres años antes que Taki; y, para colmo, un cometa destruye el pueblo de Mitsuha y arrasa con todos sus habitantes. Cuando Taki se entera de esto, ya está fuertemente conectado con Mitsuha; así como la audiencia, que después de todo lo cómico que acaban de ver realmente querían ver a ambos juntos en pantalla. Lo trágico de saber que ella no está más es algo que nadie veía venir, y esa ausencia va a aumentar el impacto de su vida en Taki, sobre todo el espectro del pueblo.
Luego de que Taki logra encontrar al pueblo destruido, la «magia» y misticismo de la trama le darán la oportunidad de entrar al cuerpo de Mitsuha nuevamente, intentando ambos salvar al pueblo. Lo dañino que puede ser el cometa, como otros aspectos en la trama, son cosas que sólo conocen nuestros protagonistas, por lo que su unión se afianza. Asimismo, la experiencia los cambia como personas: Mitsuha se vuelve más valiente y extrovertida y Taki más sensible. Además de que le fascina lo místico que tiene la vida de Mitsuha y lo que le cuenta su abuela.
Pero hablemos del MOMENTAZO (en mi opinión, claro) de la película. Cuando por fin se logran ver. Después de verlos juntos en el fallido intento de ella de verse con Taki (obviamente, al vivir tres años en el pasado con respecto a él, éste todavía no la conocía) y que se nos rompiera el kokoro, finalmente llega lo más esperado. Y sale bastante bien. Es una escena preciosa, en pleno crepúsculo. Las expresiones de ellos dos (sobre todo la de Mitsuha) son totalmente acertadas. No pude evitar lagrimear. Luego, hablan como adolescentes totalmente normales (dicen baka, hentai, y todo lo que suelen decir las parejitas adolescentes animescas). Le aporta naturalidad, pero yo esperaba más romanticismo. Es que a ver, si me encontrara con esa persona que parecía imposible ver no empezaría a estar a la defensiva un rato para luego reírnos como si estuviéramos en un anime escolar, ¡lo abrazaría y no lo soltaría por nada del mundo! Igualmente, es sólo mi punto de vista, y la escena sigue siendo lo que esperaba ver. (Por cierto, realmente maldije a Shinkai cuando acaba el crepúsculo y se vuelve al melodrama. Muy frustrante fue tener que soportar esos olvidos y separaciones).
Tenemos que esperar casi al final del film para ver cómo sigue la historia de nuestros protagonistas. Parece que todo había llegado al final. Nos enteramos de que el cambio de cuerpos se debía a la tradición de la familia de Mitsuha. Todas las mujeres tuvieron en algún momento de sus vidas esa situación. Pero no recuerdan a la persona con la que les sucedió, así que parece que lo mismo le va a suceder a la pareja que analizo hoy. Como nos indicaba en cierto modo el opening, ambos son adultos en Tokio, pero desconocen de la existencia del otro. Sienten que algo les falta, pero no saben qué. Al igual que en Cinco centímetros por segundo (2007), la inmensidad de la ciudad nos da la impresión de que sería imposible que los personajes se reencuentren, o peor: que si lo hicieran, seguiría cada uno su camino.
Ya cuando el desenlace se acercaba me había rendido. Después de todo, Shinkai se hizo la fama de realizar películas con tristes historias. No sabía que estaba viendo la más «feliz» de ellas. Así que cuando finalmente se ven en el tren, sintiendo esa conexión y se reencuentran para saber su nombre, me volvió el alma al cuerpo. (Anécdota: en la sala de cine, se oyó un suspiro de alivio general en la gente cuando los créditos empezaron). No creo que este final estuvo mal. Al contrario que con Tsuki Ga Kirei, en este caso sí necesitaba que terminaran juntos. Si no, ¿para qué tanto mensaje de la conexión y el destino? A diferencia de otras de sus obras, Kimi No Na Wa (Your Name) no es una historia para nada realista; por eso no tendría sentido imponer la distancia o las cosas que separan a la gente en la vida cotidiana. No estoy de acuerdo con las críticas con el final de la película. Compararla con otros del mismo director no tiene sentido. No mantendría coherencia con la naturaleza de la trama que nos presenta ésta en concreto.
Declaración
Me parece que no era tan necesaria una declaración en Kimi No Na Wa. De sobra sabemos y saben ellos los sentimientos que se tienen cuando la misma llega. Sin embargo, el buen uso de la banda sonora cuando pasa (Sparkle es de las mejores canciones), y la reacción de Mitsuha realmente despiertan sentimientos en el espectador. Es el giro bastante típico. La manipulación emocional que quieren lograr es bastante obvia y, aún así, es tremendamente efectiva. Llegados a éste punto en el largometraje, estamos interesados en los personajes, nos encontramos en una montaña rusa: apenas termina la escena en la que se encuentran de una vez y encima se están olvidando de sus nombres. Por lo que la escena llega para terminar de destruirnos. Mitsuha mira la palma de su mano, donde se supone que Taki escribió su nombre para evitar que ella no lo recuerde. Entonces resulta que en su lugar dice «te amo». Tocados y hundidos.
Comunicación y química
Al apenas verse, la manera de entablar comunicación entre esta pareja es tan distinta como la forma en la que se conocen. Mediante un diario en el teléfono de cada uno, escribiéndose en sus cuerpos o en cuadernos. Esto en particular no aporta mucho en la formación de su vínculo, aunque es crucial para mantener el orden en su cotidianidad.
El hecho de vivir la vida del otro, como mencioné antes, está muy bien aprovechado para generar sentimientos románticos entre ellos. Creo que van más allá del amor, si no de la absoluta comprensión y entendimiento mutuos. Saben todo de ellos y eso permite que, cuando Mitsuha no está, Taki eche de menos su presencia, convivir con la gente que la rodea y tocar sus pechos xD. Asimismo, Mitsuha al hablarle en el tren espera una reacción propia de él. La química se produce cuando se ven por todo el conocimiento que tienen de ellos mismos, que va más allá de las palabras. Para mí esa es la definición de la química: una conexión que trasciende las palabras o ciertas acciones, bastante difícil de explicar pero muy perceptible. Cuando se olvidan de la existencia del otro y explican que sienten un vacío, creo que es la incomplitud de no sentir más esa vida, que formó parte de la propia por un tiempo que no sabemos pero que es suficiente para provocar esa reacción. Es un fenómeno. Una sensación de familiaridad con alguien. También puede suceder en la vida real, pero son conceptos realmente complejos, en los cuáles no todos creen, que me parece que se plasman correctamente en este caso.
Conclusión
Por el mismo fin de la película, Taki y Mitsuha suponen una buena pareja. El elemento sobrenatural es indispensable para eso. No me parece de las mejores ya que no se los ve juntos lo bastante para conocerlos plenamente en conjunto, ver más interacciones entre ellos y poder volverse OTP o una dupla favorita.
La belleza de la película y su sensillez emocional en una historia que es puro corazón logran que nos interesemos por saber qué pasará con ellos. Consiguen que nos encariñemos con su historia y, tan sólo eso, es razón suficiente como para comentarla.
Ya saben que pueden dejarme en los comentarios su opinión sobre esta parejita o su película, que está siendo todo un fenómeno desde el año pasado. También pueden recomendarme más parejas de series o películas para llegar a analizarlas en alguna ocasión ¡Hasta el próximo #ParejasDelAnime!